Ya no hay excusas para Sijena

Han pasado casi dos meses desde que el Tribunal Supremo diera la razón a Aragón en el litigio por las pinturas murales del Real Monasterio de Santa María de Sijena, desestimando los recursos catalanes y ordenando su regreso desde el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) al lugar del que nunca debieron salir.

Observamos con sorpresa e indignación cómo esta sentencia, de obligado cumplimiento, no ha sido ejecutada y estos bienes, que son aragoneses por derecho y que en su día fueron robados, siguen expuestos en el MNAC como si no hubiera pasado nada.

El pasado 26 de junio finalizó el plazo de entrega voluntaria de las pinturas por parte del citado museo que, lejos de llevarla a cabo, no ha hecho sino poner pegas y trabas al traslado con argumentos que han sido desmontados en innumerables ocasiones tanto jurídica como   técnicamente.

Vemos con sorpresa cómo la Generalitat y, lo que es peor, el Ministerio de Cultura, ambos miembros del patronato del museo, no han movido ni un solo dedo para devolver a Aragón lo que es suyo. No ha servido de nada que el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, dijera tímidamente que se respetaría la sentencia, pero, eso sí, que dejaba la cuestión en manos del MNAC.

Algunos llevamos mucho tiempo esperando una declaración rotunda del ministro de Cultura, Ernest Urtasun, sobre esta sentencia. Porque el señor Urtasun es el máximo responsable de cumplir y hacer cumplir el contenido de la disposición judicial. ¿Por qué no va el ministro con la Policía Nacional, al igual que se hizo con los documentos catalanes depositados en el Archivo de Salamanca, a buscar las pinturas de Sijena para trasladarlas a Aragón?

¿Por qué el Gobierno de España no reclama la ejecución forzosa de la sentencia? ¿Por qué el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y sus ministros no se pronuncian al respecto? Porque están más ocupados en cerrar un nuevo modelo de financiación para Cataluña y porque Aragón, en sus planes de gobierno, no pinta nada.

La pasividad ante esta cuestión nos hace pensar que el Gobierno de España y el ministro Urtasun de verdad quieren que estos bienes, joyas del románico español, se queden de forma permanente en Cataluña porque los aragoneses no merecemos tenerlos aquí.

Si el Ejecutivo de Pedro Sánchez, que no olvidemos cuenta con una ministra aragonesa a la par que secretaria general del PSOE en Aragón, y el ministro Urtasun no cumplen con la sentencia estarán delinquiendo y, por lo tanto, deberían dimitir. Decía el ‘insigne’ ministro que el litigio por los bienes es, en realidad, un conflicto político. No, señor Urtasun, la cuestión está muy clara: Cataluña debe devolver lo que le robó a Aragón.

Pero ni Sánchez, ni Urtasun, ni Illa son los únicos que se están haciendo ‘el longuis’ sobre esta cuestión. Vemos con sorpresa cómo el diputado aragonés por Sumar (CHA), Jorge Pueyo, o los de Izquierda Unida, que apoyan al Gobierno, parece que están preocupados por esta cuestión, pero poco. A estas formaciones les inquieta más que se vayan a instalar aerogeneradores cerca del monasterio que el retorno de las pinturas murales y el cumplimiento de la sentencia.

Es una absoluta vergüenza la pasividad que están demostrando todos ellos, especialmente el ministro Urtasun, ante esta cuestión, algo que le deslegitima y debería hacerle dimitir.

Publicado en El Español de Aragón: https://www.elespanol.com/aragon/opinion/20250715/no-excusas-sijena/1003743847481_13.html